lunes, marzo 04, 2013

Pero mirá vos!

Hace tanto que no escribo en un blog que perdí la costumbre.

Pero bien! Pueden escribirme, si lo desean, ya que me llega información de sus comentarios.

Por otro lado, pueden buscarme en Facebook con el nombre de mi perfil...

Buscad y hallaréis!

domingo, febrero 21, 2010

CURSOS de APRENDIZAJE "ACELERADOS" según el Negro DOLINA

Me gusta el modo de escribir y de decir las cosas de Alejandro Dolina. Para quienes aún no lo conozcan, acá va el siguiente texto:

La velocidad nos ayuda a apurar los tragos amargos. Pero esto no significa que siempre debamos ser veloces. En los buenos momentos de la vida, más bien conviene demorarse. Tal parece que para vivir sabiamente hay que tener más de una velocidad. Premura en lo que molesta, lentitud en lo que es placentero. Entre las cosas que parecen acelerarse figura -inexplicablemente- la adquisición de conocimientos.

En los últimos años han aparecido en nuestro medio numerosos institutos y establecimientos que enseñan cosas con toda rapidez: "....haga el bachillerato en 6 meses, vuélvase perito mercantil en 3 semanas, avívese de golpe en 5 días, alcance el doctorado en 10 minutos..... "
Quizá se supriman algunos... detalles. ¿Qué detalles? Desconfío. Yo he pasado 7 años de mi vida en la escuela primaria, 5 en el colegio secundario y 4 en la universidad. Y a pesar de que he malgastado algunas horas tirando tinteros al aire, fumando en el baño o haciendo rimas chuscas, no creo que ningún genio recorra en un ratito el camino que a mí -o a cualquiera- me llevó decenios.

¿Por qué florecen estos apurones educativos? Quizá por el ansia de recompensa inmediata que tiene la gente. A nadie le gusta esperar. Todos quieren cosechar, aún sin haber sembrado. Es una lamentable característica que viene acompañando a los hombres desde hace milenios.
A causa de este sentimiento algunos se hacen chorros. Otros abandonan la ingeniería para levantar quiniela. Otros se resisten a leer las historietas que continúan en el próximo número. Por esta misma ansiedad es que tienen éxito las novelas cortas, los teleteatros unitarios, los copetines al paso, las "señoritas livianas", los concursos de cantores, los libros condensados, las máquinas de tejer, las licuadoras y en general, todo aquello que nos ahorre la espera y nos permita recibir mucho entregando poco.
Todos nosotros habremos conocido un número prodigioso de sujetos que quisieran ser ingenieros, pero no soportan las funciones trigonométricas. O que se mueren por tocar la guitarra, pero no están dispuestos a perder un segundo en el solfeo. O que le hubiera encantado leer a Dostoievsky, pero les parecen muy extensos sus libros.
Lo que en realidad quieren estos sujetos es disfrutar de los beneficios de cada una de esas actividades, sin pagar nada a cambio.

Quieren el prestigio y la guita que ganan los ingenieros, sin pasar por las fatigas del estudio. Quieren sorprender a sus amigos tocando "Desde el Alma" sin conocer la escala de si menor. Quieren darse aires de conocedores de literatura rusa sin haber abierto jamás un libro.
Tales actitudes no deben ser alentadas, me parece. Y sin embargo eso es precisamente lo que hacen los anuncios de los cursos acelerados de cualquier cosa.
Emprenda una carrera corta. Triunfe rápidamente.
Gane mucho "vento" sin esfuerzo ninguno.
No me gusta. No me gusta que se fomente el deseo de obtener mucho entregando poco. Y menos me gusta que se deje caer la idea de que el conocimiento es algo tedioso y poco deseable.
¡No señores: aprender es hermoso y lleva la vida entera!

El que verdaderamente tiene vocación de guitarrista jamás preguntará en cuanto tiempo alcanzará a acompañar la zamba de Vargas. "Nunca termina uno de aprender" reza un viejo y amable lugar común. Y es cierto, caballeros, es cierto.

Los cursos que no se dictan: Aquí conviene puntualizar algunas excepciones. No todas las disciplinas son de aprendizaje grato, y en alguna de ellas valdría la pena una aceleración. Hay cosas que deberían aprenderse en un instante. El olvido, sin ir más lejos. He conocido señores que han penado durante largos años tratando de olvidar a damas de poca monta (es un decir). Y he visto a muchos doctos varones darse a la bebida por culpa de señoritas que no valían ni el precio del primer Campari. Para esta gente sería bueno dictar cursos de olvido. "Olvide hoy, pague mañana". Así terminaríamos con tanta canalla inolvidable que anda dando vueltas por el alma de la buena gente.
Otro curso muy indicado sería el de humildad. Habitualmente se necesitan largas décadas de desengaños, frustraciones y fracasos para que un señor soberbio entienda que no es tan pícaro como él supone. Todos -el soberbio y sus víctimas- podrían ahorrarse centenares de episodios insoportables con un buen sistema de humillación instantánea.
Hay -además- cursos acelerados que tienen una efectividad probada a lo largo de los siglos. Tal es el caso de los "sistemas para enseñar lo que es bueno", "a respetar, quién es uno", etc.
Todos estos cursos comienzan con la frase "Yo te voy a enseñar" y terminan con un castañazo. Son rápidos, efectivos y terminantes.

Elogio de la ignorancia: Las carreras cortas y los cursillos que hemos venido denostando a lo largo de este opúsculo tienen su utilidad, no lo niego. Todos sabemos que hay muchos que han perdido el tren de la ilustración y no por negligencia. Todos tienen derecho a recuperar el tiempo perdido. Y la ignorancia es demasiado castigo para quienes tenían que laburar mientras uno estudiaba.
Pero los otros, los buscadores de éxito fácil y rápido, no merecen la preocupación de nadie. Todo tiene su costo y el que no quiere afrontarlo es un garronero de la vida.
De manera que aquel que no se sienta con ánimo de vivir la maravillosa aventura de aprender, es mejor que no aprenda.

Yo propongo a todos los amantes sinceros del conocimiento el establecimiento de cursos prolongadísimos, con anuncios en todos los periódicos y en las estaciones del subterráneo.
"Aprenda a tocar la flauta en 100 años".
"Aprenda a vivir durante toda la vida".
"Aprenda. No le prometemos nada, ni el éxito, ni la felicidad, ni el dinero. Ni siquiera la sabiduría. Tan solo los deliciosos sobresaltos del aprendizaje" .

ALEJANDRO DOLINA

 

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martes, febrero 02, 2010

POSTEROUS, posteando en tu blog mediante un email.



He leído en la revista USERS de este mes, que existe un servicio llamado Posterous, que permite mediante un sencillo mail, hacer un post en un blog. Como verán, no pude esperar para enviarles este material.


Se dice en algunos foros acerca de este servicio que posee pocos templates entre los cuales elegir, pero de todos modos es posible editar todo el contenido vía CSS ó HTML.


Yo lo encontré muy interesante y práctico (en mi caso personal) ya que es posible hacer una publicación en diversos blogs con un solo mail.


Yo envío este contenido desde mi cuenta de Hotmail, y queda automáticamente "posteado" en diversos sitios de mi propiedad:neticias.blogspot.comneticias.tumblr.comfaltamenos.wordpress.com, etc...


Es posible mantener varias cuentas con un mismo usuario y también realizar perfiles de grupo (Group Profiles) en donde luego, enviando un mail a "post@nombre_grupo.posterous.com" el servicio se encarga de publicar el post sólo en los blogs o servicios que figuren dentro de ese grupo.






Posee soporte para los siguientes servicios:

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lunes, febrero 01, 2010

Altoque.com, una página de inicio con lo más necesario

No suelo ser muy aficionado a utilizar "páginas de inicio". Pero creo que cuando existen buenas razones para recomendar un sitio, es necesario hacerlo.


Altoque.com, ofrece en una simple vista los recursos más utilizados de la actualidad: Buscadores, Cuentas de mail frecuentes, Redes sociales, traductores, etc.


Basta echarle una mirada y seguro la adoptarán como propia... (yo ya lo hice !).


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sábado, enero 30, 2010

Configuración del protocolo de internet TCP/IP

Por diversos motivos, es posible que necesitemos configurar nuestra conexión de red con los DNS de nuestro proveedor de internet.
En el caso de Arnet, los DNS son los siguientes (ya veremos en dónde los escribiremos):
DNS PRIMARIO:  200.45.191.35
DNS SECUNDARIO: 200.45.48.233
Para poder configurar correctamente la conexión de red, debemos ingresar al área de “Conexiones de red”.
Para ello, buscaremos el ícono de red en nuestra barra de tareas (como muestra la imagen):
ARNET-TCPIP_01
Hacemos doble clic sobre él y veremos que aparecerá:
ARNET-TCPIP_010
Allí haremos clic en el botón “Propiedades” y veremos aparecer la siguiente imagen:
ARNET-TCPIP_02
Elegimos la opción “Protocolo Internet (TCP/IP)” y hacemos clic en “Aceptar”.
Entonces veremos la ventana siguiente:
ARNET-TCPIP3
Por lo general, no es necesario configurar nada en este protocolo de red, dejando a Windows que asigne en forma automática una dirección IP al modem. Dejando las opciones siguientes:
1) “Obtener una dirección IP automáticamente”.
2) “Obtener la dirección del servidor DNS automáticamente”.
Pero si deseamos abrir un puerto para programas como eMule o similares, será necesario asignar estos valores en forma manual.
Los valores correctos serían:
ARNET-TCPIP4
Hacemos clic en “Aceptar” y ya deberíamos tener navegación.
PROBLEMAS MAS COMUNES:
Reseteo del modem:
Muchas veces, ocurre que por algún motivo se llama a la mesa de ayuda de Arnet, y desde allí se indica al usuario que realice un “Reset” (blanqueo) del modem.
Esto produce que los datos que estaban cargados en el  modem se borren y el modem vuelva a quedar como cuando vino de fábrica.
Por eso es muy importante conocer el nombre de usuario ADSL y la contraseña (más información sobre cómo recuperar nuestros datos de conexión aquí).
Será necesario ingresar los datos obtenidos en el modem para que el mismo quede como antes de realizado el “Reset”.
Mala configuración del Protocolo Internet TCP/IP:
Es muy común encontrarse con problemas en la conexión a internet si los parámetros de este protocolo están configurados en forma incompleta.
Veamos dos ejemplos:
Se configuran los valores de la dirección IP, pero se dejan en blanco los valores de los DNS. Esto impide la navegación.
ARNET-TCPIP_Error1
Del mismo modo, si miramos “por arriba” la ventana del siguiente ejemplo, pensaremos que está configurado en automático. Sin embargo, una mirada más atenta, notará que los DNS no están incluidos, pero sí se indica “Usar las siguientes direcciones del servidor DNS”. Otro candidato a quedarse sin navegación por un error de configuración. Aquí está la imagen:
ARNET-TCPIP_Error2
Como dijimos, si no prestamos la debida atención podemos equivocarnos y creer que el problema se encuentra en otro lado, cuando simplemente habría que hacer un clic en el botón de la opción de automatización.
Espero que esta información les haya sido útil.
Seguiré compartiendo diversos problemas y experiencias que me toca vivir a diario en los domicilios de mis clientes.

sábado, mayo 16, 2009

Dios anda por ahí (y por aquí)...

Sólo quería que conozcan algo de lo que Dios anda haciendo por ahí...

sábado, julio 21, 2007

Fontanarrosa... el fin de un hombre.

Cayó la oscuridad sobre los ojos de un hombre más.

¿De un hombre más?

Quizá no un hombre cualquiera.

Ahora bien. ¿Qué distingue a un hombre como el negro Fontanarrosa del resto?

Muchas cosas.

Pero no es mi intención hacerle un homenaje de despedida (que no le han faltado) sino dejar un pensamiento que relaciono directamente con la importancia o no de los hombres en general.

¿Fue, el negro, un personaje especial?

En muchas cosas sí, lo fue.

Existen muchos seres especiales. Aunque depende para quiénes lo son... (Sí. Puntos suspensivos aún cuando el negro Fontanarrosa los consideraba una omisión voluntaria).

Para aquellos para los que JUAN es especial, buen padre, buena persona, buen hijo, buen trabajador pues, cualquier argumento en contra será tomado como un ataque sin fundamentos. Para aquellos otros, que consideran a JUAN un traidor, un mal amigo, un falluto pues, el mismo argumento será todo lo contrario, es decir, la certeza de que la mala impresión que nos causaba era legítima.

Así vamos por la vida algunos, recibiendo elogios, dando penas, cosechando insultos, sembrando "buena onda", entre otras acciones más o menos amables y/o groseras.

Lo que más me dá qué pensar es lo siguiente:

¿Qué utilidad tiene, a quien muere, la trayectoria que ha tenido?

Me viene a la mente la vida de un médico como René Favaloro que luego se suicidó. Una carrera brillante, una intachable conducta, un reconocimiento que sobrepasa al de muchos, para terminar arrinconado contra la pequeñez de un trozo de plomo debido a la congoja que le embargaba por cientos y cientos de problemas a los que no logró encontrar solución.

(Todo esto, si realmente se suicidó... -acá el "negro" me hubiera permitido los suspensivos-).

El caso del "negro" es diferente. Él no escogió morir como salida a sus problemas. Él llegó al último segundo con dolor por una enfermedad que lo fué agotando. Su ánimo era golpeado a cada segundo con la certeza del fin.

Es cierto. Son muertes distintas.

Uno la buscó. Otro intentó evitarla pero ésta se empeñó en encontrarlo.

Ambos muy queridos. Ambos, personajes ejemplares.

Pero la pregunta es:

¿Sirvió de algo en ese momento crucial la trayectoria y los hechos realizados en vida?

Es interesante pensar que mientras vivimos buscamos de un modo u otro el reconocimiento de aquellos que nos rodean. Siempre. SIEMPRE!

Todo lo que hacemos es con el fin de llamar la atención hacia nuestra persona.

¿Con qué finalidad?

Deseamos ser amados.

¿En qué momento somos más amados?

Cuando no estamos más.

Cuando es imposible volver a encontrarnos.

¿Será posible que reconozcamos este error tan "humano" y comencemos a "valorar" como corresponde a aquellos seres que realmente tienen ese "valor"?

René Favaloro, no quiso esperar, porque se cansó antes de las promesas incumplidas.

El "negro" Fontanarrosa, tenía lo que quería, a los suyos, a su club Rosario Central, a su ciudad Rosario en Santa Fe, Argentina, y sus creaciones. Pero el aplauso más grande llegó cuando era tarde... (si me leyera le pediría perdón por otra oración inconclusa).

No le puedo agradecer. Ya no está aquí.

Pero voy a hacer una cosa.

Como homenaje a todos aquellos que dejaron una estela con sus vidas y nos enseñaron tantas cosas.

A partir de ahora, voy a agradecer como corresponde cada cosa que vea que merezca reconocimiento. No voy a esperar hasta que sea tarde. Lo haré inmediatamente.

Debemos conocer, como humanos, la urgencia de lo espontáneo y lo superficial que resulta nuestra existencia en la historia del mundo desde su creación y hasta su desenlace (sea cuando sea que esto suceda).

El resto, piénsenlo solos.

Un gran abrazo,

Raimundo